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> El cuerpo, la lengua, las palabras, la piel. Artistas contemporáneos de Quebec
Centre D'Art Santa Mònica
25 de feb - 31 de mar 1999
La Rambla, 7

www.artssantamonica.cat

Comisario general: Didier Prioul Comisario de la exposición: Louise Déry Comisario de la sección de vídeo: Nicole gringas

 

En colaboración con el Centro de Arte Santa Mónica de Barcelona, el Museo de Quebec presenta desde el 25 de febrero al 31 de marzo "El cuerpo, la lengua, las palabras, la piel. Artistas contemporáneos de Quebec."

Proponer una idea del arte que se hace en Quebec en el contexto del Centro de Arte Santa Mónica, en tierras catalanas, trae como punto de referencia natural la situación de la lengua, la resistencia de nuestras lenguas frágiles. La lengua está al acecho y crea un oído. Fina, posee una sonoridad pero s'adrega también a Hoja, afirmando su visibilidad por su plasticidad Se hace signo, trazo, avanza a menudo en el campo visual.

El siglo XX ofrece miles de ejemplos de procesos artísticos y de obras donde la lengua, el texto y la palabra estando conjugados a partir de enunciados visuales. Sin tener que remontarse acercarnos hasta a los dadaístas y surrealistas que se ampararon con las letras, se pueden evocar desde aquí las realizaciones más recientes de los artistas conceptuales, comprometidos con el desarrollo repetido de estructuras sistemáticas tales como diarios, registros y textos diversos, tratados al mismo tiempo por su significación y su plasticidad. Esta característica no es, por tanto, propia de Quebec.
Se sobre todo con el vínculo frecuente del cuerpo donde se pueden encontrar indicios de una posible singularidad del arte contemporáneo de Quebec. Se puede percibir una concentración evidente de estos vínculos que, entre el texto y la imagen del cuerpo, vienen a sugerir relaciones de formas muy diversas. La variedad de los tratamientos del cuerpo, dibujado, pintado, esculpido, fotografiado, videografiat ... alimentan la investigación sobre la identidad, la fragilidad o la precariedad de la vida. Se encuentra la necesidad de llamarlo como una realidad existencial, íntima e individual, del mismo modo que hay que situarlo en tanto que ubicación social, política y colectiva.

Reagrupar, tan conceptual como físicamente, algunas producciones artísticas de Quebec en torno a las cuestiones del cuerpo y la lengua incita a identificar diferentes relaciones surgidas de las obras prestándose a una relación fecunda. Dado que la forma de la exposición es también un texto-un discurso en algunos casos-esta se ha constituido con una relación estrecha con el espacio expositivo del Centro de Arte Santa Mónica. El claustro, con su patio central rodeado de pasillos, permite recrear una mirada central, articulada a continuación por focos diferentes o específicos. Se desarrolla entonces una primera tipología, la de la mirada qué multiplica los puntos de vista, los vuelos y el giravols. Una segunda, la de la relación, se edifica como un intertexto con sus efectos de-narración, sus episodios, sus recorridos escenificados. Las obras se dejan ver tan pronto como palabras. tan pronto como silencios.
La palabra
" El cuerpo, la lengua, las palabras, la piel. Artistas contemporáneos de Quebec" nos lleva en primer lugar hacia un grupo de obras constituidas a partir de la palabra. Se reencuentran imágenes que desafían la mirada o la buscan, que avanzan hacia nosotros a partir de ejes múltiples. Retratos de espaldas, retratos de frente, entramos en un mundo de tensiones. En el corazón del espacio, la lengua se expone: se amplía, irriga a su alrededor. En la periferia, obras en secuencias con imágenes que desfilan como frases. Palabras y retratos de gestos que se concillen con el cuerpo. Los artistas de este primer grupo son Jana Sterbak, Raymonde April, Nicole Jolicoeur, Robert Racine, Dominique Blain, Myriam Laplante, Jean-Jacques Ringuette y Robert Pellegrinuzzi. .

El silencio
Un segundo grupo de obras hace referencia a la idea del silencio y se. En un ir-volver entre pintura y fotografía. Se reencuentran imágenes que se presentan como un desafío a la mirada y que ahogan su visibilidad en los efectos de la moderación y del fraguado. El silencio es visible en las obras de Monique Régimbalt-Zeiber, Mario Costa, Angela Grauerholz y Genevieve Cadieux,
. La voz
Hacer retumbar las palabras en la boca
La voz es un medio complejo, frágil, fluido, vasallo al mismo nivel que el vídeo. Es el vehículo de emociones múltiples: algunas divididas, otros alejadas. Cada voz tiene su personalidad, su calor, su timbre que le pertenece. Algunas voces son quebradizas, otros cálidas o profundas, algunas se rompen al momento en que menos lo esperas. La voz es la base de la identidad.
En el vídeo contemporáneo, la voz ocupa un Iugar privilegiado: es a menudo el mismo de la imagen. El vídeo de Quebec se lleno de palabras únicas. La confesión, la revelación, el callejeo, la ficción, la preformance oral, el placer de decir y, finalmente, el mutismo son las líneas directrices del proyecto "Hacer retumbar las palabras dentro laboca".
Una serie de ocho programas, con una duración de 8 horas, constituye un panorama de estos testimonios después del inicio de los ochenta.

Los Videos son de Lue Bourdon, Mario Costa, Lue Courchesne, Donigan Cumming, Louis Dionne, Nikki Forrest, Charles Guilbert, Serge Murphy, Michel Grou, Nelson Henricks, Manon Labrecque, Robert Morin, Lorraine Dufour, Monique Moumbloc, Robert Racine, Cathy Sisli, Esther Valíquette y Michéle Waquant. '

> Espai Video.
Hacer retumbar las palabras

 

El vídeo quebequés está surcado por palabras únicas, testimonios inquietantes y relatos a menudo fantásticos. Hacer retumbar las palabras en la boca señala la fuerza? A esta presencia del lenguaje a través del color, su poder de evocación y, a veces, la crueldad de sus propósitos. Estos vídeos se reúnen en torno a la voz y su capacidad para generar imágenes. La voz está aquí el correlato de la imagen.
Los modos de enunciación se diversifican: lo contiene, la tabulada, la confesión, la ironía, la rabia, la liberación, la comedia hasta el búrlese. Narrar una historia, compartir una experiencia, comentó un evento, vivido o inventado, describir Alió que pasa delante o, mejor aún, provocar la palabra del otro, son las aproximaciones exploradas por videasta seleccionados.

La voz es el espacio de la identidad. Podríamos decir que se trata de su entorno primordial: por allí donde pasan los préstamos a otras lenguas (anglicismos, galo-Galicismos, neologismos), allí donde el acento se reconoce y se hace presente, desvelando entonces la aptitud a integrar , a fundirse en otra cultura; allí donde se esconde el no dicho lo prohibido.
El lugar desde donde se habla se convierte en crucial: el anclaje físico simbólico y territorial a la vez. Las voces, como los cuerpos o los paisajes, dejan rastros. Se hacia ellos que los videasta de Hacer retumbar las palabras en la boca hacen marcha atrás. Se impone, de una obra a otra, la dimensión ritual inherente a los hechos de decir y de explicar y, finalmente, del placer de escuchar y recibir las palabras. El vídeo quebequés tiene múltiples voces.
Nicole Gingras, comisaria