evento |
|||||||||||||
>
Marta Minujín. Obras 1959-1989 Comisaria:Victoria Noorthoorn |
Malba cierra el
año con una retrospectiva de la artista argentina Marta Minujín
con más de 100 obras que hacen foco en su producción histórica
de las décadas del 60, 70 y 80. Curada por Victoria Noorthoorn, la exposición
invita al público a adentrarse en las obras y las acciones más
y menos conocidas de la artista, realizadas tanto en Buenos Aires como en París
y Nueva York, entre otras ciudades. “El objetivo principal de esta exposición
es acercar al público la complejidad, coherencia, y densidad crítica
de una obra que conocemos poco; y enfatizar su pertinencia contemporánea”,
sostiene la curadora. El diseño expositivo presenta un formato afín a la vorágine de Marta Minujín, con paneles curvos y diagonales que invitan a introducirnos en su laberinto creativo. Incluye obras pertenecientes a colecciones públicas y privadas, 20 proyecciones con registros fílmicos, la reconstrucción y recreación de obras históricas e importantes documentos del prolífico archivo de la artista. Están representadas sus obras más paradigmáticas, como
La Destrucción (1963), ¡Revuélquese y viva! (1964), La
Menesunda (1965), El Batacazo (1965), Simultaneidad en Simultaneidad (1966),
Importación-Exportación (1968), Kidnappening (1973), The Soft
Gallery (1973), Imago Flowing (1974), La academia del fracaso (1975), Comunicando
con tierra (1976), El Obelisco de pan dulce (1979), El Partenón de libros
-que realizó con títulos prohibidos durante la dictadura militar
en 1983- y Operación Perfume (1987), entre muchas otras. Además,
Malba exhibe en la terraza del museo una selección de esculturas producidas
por la artista durante los últimos 20 años.
“En líneas generales, la exposición se concentra en la Minujín que no conocemos dadas las escasísimas exposiciones analíticas de esta gran artista en nuestro país. Me refiero a las facetas relativas a una producción que además de libertad, vorágine, exceso y egocentrismo, se caracteriza también por su método, precisión, rigor, resistencia, generosidad y un fundamental espíritu crítico, todas cualidades que claramente han contribuido a conformar una producción de vanguardia tan variada como compleja y a constituir a Marta Minujín en una autogestora de proyectos artísticos como no ha visto la Argentina”, explica Noorthoorn. La investigación presenta a Minujín en diálogo con su tiempo, con los eventos nacionales e internacionales que se sucedieron en los diversos momentos de su producción y con las comunidades artísticas con las cuales se relacionó, tanto en la Argentina como en el mundo. Da cuenta de la forma en que la siempre provocativa producción de Minujín respondió, desde un primer momento, a una década de continuas transformaciones –los 60-, que vio nacer y desarrollar el nuevo realismo, el Pop, el arte conceptual, el arte de la performance, el happening, el arte de los medios, el videoarte, la psicodelia y el arte de acción y que, a su vez, transitó períodos de dictadura y violencia a nivel nacional y situaciones mundiales tan paradigmáticas como la Guerra de Vietnam o el viaje a la Luna. A todas estas circunstancias, responde Minujín una y otra vez. Junto con la exposición, Malba editó una importante publicación de 300 páginas, bilingüe español – inglés, con la reproducción color de las obras representadas en la muestra. El catálogo incluye una introducción de Eduardo F. Costantini, fundador y Presidente de Malba; un ensayo curatorial a cargo de Victoria Noorthoorn (El vértigo de la creación), que dialoga con diversos textos elaborados por un equipo de investigación: la Biografía, de Javier Villa; la Bibliografía, de Cristina Blanco; una sección de Obras, con textos de Jimena Ferreiro Pella; además de una Cronología artística internacional, a cargo de Victoria Giraudo. Finalmente, la sección Documentos permite acceder a una selección de textos históricos.
|